jueves, 8 de septiembre de 2011

HAY GOCES Y GOCES Por Sergio Rodríguez



REGISTRO DE LECTURA

HAY GOCES Y GOCES POR SERGIO RODRIGEZ.


Algo que siempre es “del orden de la tensión”.
(Periódico Pagina-12-Argentina-psicologia del jueves, 27 de julio  2006)

Se inicia haciendo una diferenciación entre placer y goce, donde el placer es la menor excitación, lo que desaparece la tensión, en  él no se fuerza, se distancia del goce porque este es en el sentido que el cuerpo se experimenta, siendo siempre del orden de la tensión, del forzamiento, del gasto, hay goce donde comienza aparecer el dolor,  donde se puede experimentar una dimensión del organismo, del cuerpo, que de otra manera sería difícil, a diferencia del placer en el goce hay un forzamiento, un gasto, puede ser sufrimiento pero solo algunas veces.

El goce aunque esta relacionado con el deseo, es otra cosa, se reconoce una causa que no es la del deseo, ya que este surge por la pérdida del objeto y la causa del goce está en el significante, cada parte de nuestro cuerpo y cada parte del cuerpo del otro  está nominado por un significante, y es  al hacer uso de él,  lo que nos  permite saber que hacer al ejercer el goce y como ponerle fin a cada acontecimiento de este,  al cual si no se supiera como colocarle fin terminaría en la muerte o cualquier otro acontecimiento.

Lacan diferencia cada tipo de goce: goce  fálico como fundamental del goce, ya que este está limitado por el significante y por ello también tiene relación con la realidad.
Goce del Otro, Ese goce del otro es en realidad del Otro que no hay, ya que como hemos visto no es posible saber cómo goza el Otro, como ya se había mencionado el goce es de sí mismo, del propio cuerpo, ya que del Otro haremos muchas interpretaciones pero no se sabrá en realidad lo que le pasa, ya que ni él mismo lo sabe. Pero  Lacan lo desarrolla como un fantasma neurótico, siendo este una ilusión que nos lleva a pensar que mientas uno no goza el otro si, siendo uno de los más terribles para la sociedad, como las guerras, luchas entre otros.
 Finalmente el Otro goce, a veces llamado el goce femenino, descrito como el no limitado por el significante, siendo el acceso menos improbable para las mujeres que para los hombres y sobre todo si ella ha salido de la posición histérica, ya que con esta posición se goza con el mismo cuerpo,  presentándose un obstáculo, lo mismo sucede a los hombres cuando no logran restarle importancia a su pene  para poder acceder a todo su cuerpo, siendo esta experiencia imposible de expresar  con palabras.


GLOSARIO
Inefable: Que no se puede explicar con palabras.

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